zondag 13 november 2016

Sábado 12 de noviembre 2016

HOy empezamos como todos los sábados, saludándonos, cantando, pasando lista de presencia y haciendo nuestro ejercicio de respiración para activar nuestros sentidos.

Después hablamos de las partes del cuerpo que habíamos aprendido la clase anterior, en especial del esqueleto y recordamos para qué nos sirve tener tantos huesos y cómo podemos cuidarlos.

Y miramos un video muy instructivo al respescto


También aprendimos que en nuestra cabeza, dentro del cráneo tenemos un órgano muy pero muy importante, el cerebro. Esto sí que un descubrimiento para la mayoría de los niños.

Así que la profe prometió que la próxima clase para festejar su cumple va a traer una torta muy especial con forma de cerebro.

Después fuimos a la biblioteca en busca de libros sobre el cuerpo humano y los sentidos. Finalmente encontramos uno.



Después hablamos de los sentidos y en especial sobre el sentido del tacto.

La profe trajo una bolsa negra llena de elementos. Teníamos que meter la mano sin mirar el contenido y con nuestro tacto sentir la forma, la textura y así tratar de adivinar de qué objeto se trataba. Como lo profe tenía la bola no pudo hacer fotos.

Después hicimos otro juego muy divertido. En parejas, un niño con los ojos vendados y el otro tenía que a adoptar una posición rara con su cuerpo. El compañero con los ojos vendados tocando a su compañero tenía que reproducir la posición del niño sin venda. ¡Muy divertido!





Después llegó la hora de la merienda y como festejábamos el cumple de Nicholas, primero hicimos la rutina del cántico, las velas (imaginarias) y los tres deseos. Hablamos de lo que son los deseos y le ayudamos a Nicholas a soplar las velas para lanzar sus deseos al Universo.




Después Nico repartió sus galletas una por una.

Una vez terminada la merienda, nos pusimos a trabajar en el regalo colecivo para Nico. Una guirnalda decorada por todos los niños y maestra de la clase. ¡Nos quedó precioa!



Mientras trabajábamos muy concentrados en esta tarea creativa, la profe nos puso una música muy bonita: El adagio de Albinoni.
Para muchos niños ese música de muertos ya que algunos dicen haberla escuchado cuando 'un señor' se murió y mi mamá se puso muy triste. Una conversación muy particular y sorprendente con niños de 5 años, todo en español y con mucha naturalidad.
Es una música hermosa, fue la conclusión de todos.








Y los últimos quince minutos de la clase los dedicamos a cantar y tocar juntos y de paso aprendernos un par de canciones para la fiesta de Navidad.

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